PESTAÑAS

Este blog no está vacío

Este mensaje se está escribiendo el 24 de agosto del año 2022, el día en que cumplo 72 años y mi salud, después de muchos avatares, se está yendo día a día; no sé cuánto me queda pero espero me de tiempo a terminar este proyecto y sacarlo a la luz... a mi manera. 

Va para el futuro, no para quienes busquen a sus antepasados en la actualidad. 

En un principio pensé en publicar este blog de forma libre, hasta que comprendí que lo único que interesa a demasiados es copiar sin más para su propio interés, su genealogía, no para ayudar a completar lo que es una idea general. Y los Saldamando, hayan nacido en el lugar que sea y vivan donde vivan, provienen de una única rama que nació en Vizcaya (España). Y esa idea tan individual de muchos es lo que ha hecho que cambiara mi proyecto inicial, y que no sea publicado hasta el 24 de agosto del año 2100, cuando cumpliré 150 años (y no existirá absolutamente nadie de los que viven o estén a punto de nacer ahora mismo... ni siquiera yo). 

A partir de ese 24 de agosto del 2100 irá apareciendo la historia de algún Saldamando junto con detalles que considero esenciales, fotos, etc. Se verán los días 24 de cada mes... hasta que la historia de nuestros antepasados termine.

La idea de esta genealogía nació en mi mente en el año 1995. La historia de los Saldamando comienza en 1450 (hasta ahí he podido llegar) y termina conmigo, aunque por lógica no seré yo quien le ponga mi final.

Para un futuro donde en algún momento uno de mis descendientes (que no necesariamente tienen que ser ni hijos ni nietos), tenga curiosidad por conocer de dónde viene... y continúe esta aventura.  

He pensado en mil formas distintas de cómo hacer que todo esto no se pierda, y la única que he encontrado es esta. Espero que para entonces Blogger y su dueño Google todavía existan. 

Y a ti, que un buen día sentirás la curiosidad de buscar quiénes vivieron antes que tú, sobre todo refiriéndose a España (o cualquier parte del mundo) es quien en realidad serás el heredero o heredera de todo este contenido. Y para ti es por quien estoy escribiendo. Espero que lo disfrutes como yo rellenando la vida de quienes nos precedieron, y sobre todo continúes donde lo he dejado. 

Yo no estaré pero... nos vemos dentro de 78 años. No te asustes; te llevaré de la mano.


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